Con la llegada de las competiciones internacionales, como la Copa de Europa, el estilo de uniforme del sur de Europa se adoptó en el resto del continente y para el final de la década, los equipamientos pesados y las botas de los años previos a la guerra fueron abandonados completamente. Cuando un equipo del F. C. Dínamo de Moscú hizo una gira por la Europa occidental en 1945, generó tantos comentarios por sus grandes pantalones como por la calidad de su juego.